El
día 10 de febrero el Espeleo Club Castelló, inició la VIII edición del Curso de Iniciación a la Espeleología.
Este
año contamos con 7 participantes en el curso, el cual dió el pistoletazo de
salida con las clases teóricas en el polideportivo Gaetà Huguet, además de un
primer contacto con el equipo personal de progresión vertical. Contamos en este
caso con monitores con un amplio conocimiento de los materiales, técnicas de
socorro, seguridad en cavidad, nutrición, topografía, bioespleología..., que durante el curso irán ampliando los contenidos de cada asignatura.
Debemos indicar que, como novedad este año, los cursillistas recibieron el
manual de espeleología de la editorial Desnivel, que es un gran punto de apoyo
para las asignaturas teóricas, además de aplicaciones prácticas.
Clases teóricas. |
Clase de nudos. |
Como
ya hemos comentado, el primer contacto con el equipo personal de progresión
vertical lo tuvieron durante la tarde de la primera jornada en el polideportivo
Gaetà Huguet, dónde instalamos unas cuerdas en un arco fijo preparado para esta
finalidad. Los alumnos practicaron técnicas de progresión, cambio de aparatos,
paso de nudos, etc…
Equipándose. |
Practicando en las cuerdas fijas. |
El
domingo día 11 nos dirigimos a Montán, a la Cova de Cirat, teniendo como punto
de encuentro el bar de la piscina de Montán, nos dirigimos sobre las 9:30 hacia
la cavidad, siempre intentando subir el
mínimo de coches, para evitar cualquier molestia.
Nos
equipamos, y antes de entrar, se les explica la topografía que se les ha
entregado, para que en ciertos puntos vayan localizando su posición. Además se
vuelven a explicar las normas de seguridad básicas dentro de cavidad para
evitar cualquier accidente.
Iniciamos
entonces la actividad entrando a la cavidad y salvando una primera trepada de
cinco metros, que hay para continuar la progresión en la cueva, con un
electrón, asegurados siempre con una cuerda y mosquetón al maillon, por el cual
suben todos los participantes en el curso.
Subiendo por el electrón. |
Continuaremos el recorrido salvando
diversos destrepes, en los cuales no encontramos ningún problema con los
cursillistas, que siempre van entre monitores y auxiliares. Siguiendo el
recorrido, vemos que la cavidad, aunque está un poco húmeda, en zonas por las
cuales corría agua actualmente están secas, gours que parecían verdaderas
piscinas ahora están secos y parece que no volverán a recuperar su esplendor.
Montando un punto caliente. |
Llegaremos
al gour final de la planta superior, que también encontramos seco, únicamente
se encuentra agua en una pequeña zona escondida que da paso a un gatera que
llega a una sala muy pequeña. Nos dirigiremos luego, retrocediendo unos metros,
a la planta inferior, pasando por una serie de gateras y destrepes, para llegar
a una rampa, que instalada con cuerda en anclajes naturales, para evitar
accidentes, nos llevará al final de esta planta, en la cual comeremos para
reponer fuerzas y comentaremos la experiencia con los alumnos.
Una
vez hemos repuesto las energías, comenzaremos la ascensión por la cuerda y
treparemos unos metros, siempre asegurados. La vuelta hacia el exterior se
llevará a cabo sin ningún incidente, y la primera trepada que salvaron al
entrar con un electrón, ahora utilizarán el rapelador para bajar por la cuerda
que previamente se había instalado.
Foto de grupo en el interior de la cavidad. |
Acabamos
la actividad a media tarde, por lo que decidimos hacer una parada en el bar de
Montán para intercambiar opiniones, experiencias y sensaciones. Y nos damos
cuenta que tenemos un equipo de alumnos que tienen muchas ganas por continuar,
avanzar y evolucionar en la espeleología.
Texto
redactado por Carla.
Fotos
realizadas por Ferrán, Gila y Esteban.