El segundo día de estancia por Euskadi,
el 9 de septiembre, visitamos la cavidad más clásica de Itxina: Otxabide Pagozabala
Ganekoaxpea, conocida de forma coloquial como Otxabide.
Esta sima se exploro en el año 68 por
el GEV. Ahora, tras la conexión de múltiples cavidades del macizo de Itxina,
forma parte de un gran sistema subterráneo: Sistema ITXINA’PE SAREA, que con 49
km. de desarrollo es la 3° cavidad de Euskadi y la 11° del estado español. Este
sistema está siendo explorado por el GAES de Bilbao.
La boca de entrada habitual está
colgada de una pared de Itxina. Geológicamente Itxina es un macizo de calizas
Urgonianas del Cretácico muy karstificado. Presenta un interesante exokarst que
conforma un relieve laberintico con multitud de lapiaces, dolinas, crestas...
Tras la boca de entrada encontramos algunos
conductos horizontales que nos llevan a una trepada y a la cabecera del gran
pozo de 120 m. Aunque en la topografía aparezca como dos pozos encadenados de
45 y 72.
Galería Principal.
Una vez en su base tenemos kilómetros
de "galeriones" para recorrer. Se trata de un enrejado de galerías fósiles
de muy buen porte y que presentan los característicos golpes de gubia de las
cavidades freáticas.
Nosotros realizamos un recorrido que nos
llevó a la Sala Gorbea y de vuelta pasamos a ver el río, la única galería
activa que visitamos.
Estalagmita en la galería Gorbea.
Para realizar este itinerario, en la
base del pozo principal continuamos descendiendo y salvamos un pozo de 7 m. por
un paso entre bloques con varios resaltes. Más adelante superamos una zona con
mucho barro. Las galerías son enormes y muestran en todo momento una morfología
freática presentando secciones circulares u ovaladas.
Un ángel en la galería Gorbea
(Foto: Vicente
Barraquet)
Continuando por la principal aparece un
escarpe a la izquierda por el que subimos para alcanzar la galería del
campamento. Para continuar subimos un resalte de unos 8 m. por medio de una
cuerda fija y ascendemos un rampa. Aquí la galería se convierte en un gran
cañón con el techo a gran altura y las paredes y techos pulidos y con golpes de
gubia. Se trata de las galerías del pulpo.
Más adelante llegamos a un desfonde donde
montamos un pozo con un natural de cabecera y un desviador. En la base del pozo
continuamos por un paso entre bloques que nos deja en una galería más pequeña dirección
este.
Por este conducto, la galería Gorbea,
vamos viendo varias bifurcaciones, pero nos dirigimos hacia la Sala Gorbea.
Esta sala se sitúa tras un par de zonas estrechas desobstruidas. Está repleta
de formaciones.
Galería del río.
Desde aquí desandamos nuestros pasos
pero al descender el resalte que nos deja en la sala del campamento, tomamos la
galería descendente de la izquierda que nos lleva al rio y nos permite volver a
la base de los pozos por otros conductos llamados galería principal.
Se trata de una cavidad impresionante
por sus volúmenes y por la belleza de sus galerías.
Detalle de una estalactita (Foto: Vicente
Barraquet)