miércoles, 19 de febrero de 2025

LA COVA DE LA SOTERRANYA (VISTABELLA)

La Cova de la Soterranya se ubica en la Serra del Boi, al norte del macizo de Penyagolosa y en el margen derecho del riu Montlleó, entre las poblaciones de Vistabella y Culla, estando dentro del término municipal de Vistabella. Esta cueva se abre en calizas del Jurásico superior-cretácico inferior, en un pequeño escarpe de unos 5 metros que se eleva 200 metros sobre el lecho del Montlleó, en la cota 728 metros. Por encima de la cavidad, a unos 90 metros por encima, la ladera donde se abre la cueva esta coronada por la Moleta de Dalt, una pequeña muela compuesta por calizas y margas del Cretácico inferior Hauteriviense-Barremiense (cota 814 metros). La masía más próxima que encontramos por la zona es la de la Munda, ubicada a unos 800 metros al noroeste.

Vista de la zona, con la Moleta de Baix y por debajo la entrada de la cavidad.

Boca de la cavidad, repleta de lentiscos que la ocultan totalmente.

Perfil de la montaña con los fenómenos reseñados.

Presenta una boca de 20 metros de anchura por unos 2 metros de alto. Prácticamente toda la boca esta protegida por un muro de piedra, junto con grandes bloques desprendidos, excepto los 4 metros más meridionales. La cavidad penetra hacia el noroeste, con un recorrido lineal de 22 metros, mediante un conducto de amplias dimensiones. Por ello podemos considerar la cueva como una sala con unas dimensiones máximas de 22 x 16 x 12 metros. Esta sala presenta una primera zona donde el techo oscila entre 2 y 4 metros de altura, y otra zona final donde destaca una cúpula que alcanza los 12 metros, en cuya base aparece una gran estalagmita que se asienta sobre una colada medio colgada y desmantelada parcialmente en su parte inferior. El suelo de la cavidad es de tierra, siendo en un primer tramo el suave pendiente descendente (-1,4 metros) y posteriormente asciende, estando la pared final de la sala a +1 metro sobre la boca. En el tramo inicial en las paredes laterales aparecen coladas, así como un nivel de relleno reciente ubicado unos 50 centímetros por encima del suelo actual. En este tramo en el techo aparecen algunas pequeñas cúpulas formadas por disolución. Las continuaciones laterales son escasas o se vuelven impenetrables a los pocos metros. Por las características del conducto, posiblemente se trate de una surgencia fósil o paleodren relacionado con la evolución del riu Montlleó.

Gran estalagmita en la parte final de la cueva.

Lateral derecho de la sala, con pequeñas columnas y coladas.

Cúpula.

Zona más próxima a la boca.

En la parte final de la sala es donde aparece la citada columna, que se erige sobre una potente colada de 4 metros de diámetro. El tamaño de la columna sin contar la colada sobre la que se asienta es de 4 metros de altura y unos 3 metros de diámetro en su base, quedando todavía otros 4,6 metros desde su parte superior hasta el techo de la cúpula. Tanto la colada como la columna están formadas por unos grandes cristales de calcita, que se disponen algunas veces en formas onduladas en potentes capas y en otras capas más delgadas más o menos horizontales. Por debajo de las capas de cristalizaciones encontramos un relleno de cantos centimétricos, sedimentos de tipo fluvial que en algún punto se encuentra entre dos capas de cristalizaciones. En el punto donde la colada queda desmantelada, las cristalizaciones inferiores de la colada quedan a 1,3 metros del suelo de la sala. Tanto la columna y la capa de relleno de cristales como el relleno de cantos inferior son elementos muy interesantes que pueden aportar información de la antigüedad de la cueva y su génesis.

Columna con el detalle de las cristalizaciones y el relleno sedimentario inferior.

Detalle del relleno emplazado por debajo de la estalagmita.

Cristalizaciones.

Otro aspecto destacado de la cavidad es la pared final de la sala, que esta compuesta en su parte inferior, hasta unos 4 metros de altura, por un relleno de travertino donde se distinguen los característicos tallos de diferentes grosores, que aparecen concrecionados por encima. 

Topografía de la cavidad realizada por el ECC en 1994.


Topografía geomorfológica, donde se recogen los diferentes rellenos,
morfologías y procesos que encontramos en el interior de la cueva.


También en la pared final y por encima del travertino encontramos una colada y en los últimos metros de cúpula se desarrolla un nivel de conglomerados con una matriz pequeña, centimétrica.




Diferentes imágenes del travertino localizado en la cavidad,
con gran cantidad de pequeños tallos.

Resto de un tallo más grueso.

Respecto al nivel de travertino, también lo encontramos en el entorno. En primer lugar, en un pequeño rincón rocoso siguiendo el mismo cortado donde se emplaza la cavidad, a unos 40 metros al sur de la boca. Y, en segundo lugar, si seguimos este cortado hacia el sur, encontramos un largo escape de 200 metros compuesto por conglomerados y travertinos. Este nivel no aparece reseñado en la cartografía geológica, pero por sus características podría ser una formación del Terciario. Este nivel ubicado 200 metros sobre el cauce del rio indicaría una fase de relleno muy antigua ya que se emplazan muy elevadas sobre el cauce y sin conexión con los sedimentos fluviales Cuaternarios. Pequeños afloramientos que parecen similares se han descrito en el entorno del Montlleó, uno por debajo del Picaio y otro en el riu Sec, al noreste del mas de la Creu, ambos entre 200 y 300 metros por encima del cauce actual del Montlleó y que se les ha atribuido un origen precuaternario.

No es raro encontrar este tipo de conductos fósiles elevados muchos metros sobre el cauce del Montlleó u otros barrancos próximos, presentándose como surgencias fósiles. En el caso de la Cova de la Soterranya resultan muy interesantes los rellenos que alberga, tanto los cantos de tipo fluvial, como las capas de concreción y los travertinos. Estos últimos podrían ayudar a afirmar un origen precuaternario para la cueva, es decir, donde los restos de travertino fueron arrastrados al endokarst y se depositaron en el interior de la cueva. Otra opción también probable es que la cavidad se formara posterior al nivel de travertinos, desarrollándose una parte en calizas y otra en travertinos y conglomerados.

Vista del cortado compuesto por conglomerados y travertino,
donde se emplazan pequeñas cavidades.