viernes, 26 de agosto de 2022

Grotte de Trassanel (Aude, Francia)

  

Reseau 4 de la Grotte de Trassanel.

 

De nuevo Lydie y Luis hemos vuelto a visitar el país vecino para continuar con el conocimiento de sus magníficas cavidades. Es la tercera ocasión en este 2022 que visitamos las cavidades del Mediterráneo francés. Este mes de agosto hemos estado por los departamentos de Aude y Hérault. La primera cavidad visitada fue esta soberbia red, que parece tener una clara conexión con la red de Lo Gaougnas o la Grotte de Cabrespine, aunque su conexión física es actualmente inexistente esta englobado en una misma red de drenaje subterráneo. Mas exactamente, esta cavidad es un vestigio fósil de la red de drenaje de Cabrespine.

Inicio del ramal noreste del nivel inferior.

 

La Grotte se sitúa en el sector del Aude de la Montagne Noire. Este macizo kárstico está "formado por formaciones paleozoicas, intensamente plegadas. La vertiente sur del Aude incluye una serie de capas tectónicas apiladas unas sobre otras y presentando en el afloramiento una alternancia de bandas subparalelas de carbonatos (principalmente calizas y dolomitas) de orientación OSO-ENE separadas por terrenos no karstificables (esquistos, areniscas, cuarcitas)" (Crochet P., Subias C. & Guiraud A., 2020).


 

El suelo del cuarto nivel aparece cubierto de sedimentos, pero las paredes bien concrecionadas.

 

"La Grotte de Trassanel pertenece a una red de las denominadas "antiguas", de gran desarrollo, excavadas principalmente en flujo freático, independientes de la topografía actual y condicionadas por las grandes estructuras geológicas (Lo Gaougnas, Trassanel, Cazals, Limousis, Gaubeille, Rieussec, etc.). La Grotte de Trassanel es un magnífico ejemplo de este tipo de redes, con cuatro plantas horizontales superpuestas, testigos del progresivo descenso del nivel base". (Dowey A. & Clergue P., 2010).

 

Macarrones en el ramal suroeste del nivel inferior.

 

Con 6.525 m. de desarrollo y unos -177 m. de profundidad es la 4° cavidad más extensa del Aude. Nosotros accedimos por la boca 2, que da acceso al segundo nivel. Este nivel está muy concrecionado, pero el tamaño y desarrollo de las galerías es menor que el del nivel 4, que es el más grande, extenso y voluminoso de la gruta. Nada más traspasar la puerta de entrada enseguida nos encontramos en una amplia sala muy decorada por diversos espeleotemas, donde descendemos una rampa con ayuda de una cuerda instalada en fijo. En la zona cercana a la entrada encontramos los restos óseos de un reno y de un oso cavernario. Visitamos algunas salas se este nivel, pero enseguida fuimos a buscar la estrecha diaclasa que nos lleva al pozo de acceso al tercer nivel. Este pozo tiene en su cabecera los restos de un antiguo torno o cabrestante para descender esta vertical. A su vez, y como es habitual en las cavidades francesas, abundan los hierros introducidos por los espeleólogos. En este caso existen grapas en todos los fraccionamientos para facilitar la progresión, también una plataforma de vigas y chapas metálicas para acceder más cómodamente a la cabecera del P-93, y otra estructura de hierro y madera para ayudar a salir de este pozo y evitar realizar un péndulo. Porque esta vertical de 93 m. no hay que descenderla hasta abajo, a unos -75 m. hay que salir para acceder a las amplias galerías del tercer nivel. Este nivel posee muchos suelos desfondados que van a dar con el cuarto piso de la cavidad.

 

Grotte de Trassanel.

 

Una vez salimos del pozo y superamos un cómodo pasamanos tenemos que seguir de frente para enseguida, en la primera bifurcación, tomar la galería de la derecha donde a los pocos metros veremos el pasamanos de aproximación a la cabecera del pozo de 43 m. que nos deja en el cuarto piso. El cuarto piso es el que vale la pena visitar. Sus galerías son muy amplias, con el suelo cubierto de sedimento y adornado con grandes coladas. Primero visitamos el ramal noreste, del cual disfrutamos por sus grandes y bellas formaciones. Es de destacar el contraste entre algunas banderas y coladas blancas y el resto de espeleotemas y suelo de la galería que presenta una coloración marrón debida al barro. A mitad del recorrido encontramos una cuerda para subir a una ventana y a continuación volver a bajar, superando de este modo una barrera de concreciones calcáreas que cierra casi por completo la galería. Justo al bajar esta corta cuerda nos topamos con una bella colada y unos preciosos conos. Continuamos hasta el final de este conducto, siempre sorprendidos a cada giro del meandro por sus espectaculares coladas y banderas.

 

Conos y coladas en el ramal noreste del nivel inferior.

 

De vuelta a la base de los pozos comimos y seguidamente visitamos el ramal suroeste. Aquí el volumen de la galería aumenta considerablemente, en algunos lugares el techo queda muy alto, a más de 30 o 40 m. Este ramal también está muy concrecionado, además de grandes coladas y banderas también vemos muchas paletas, presentes por toda la cueva. También existen algunos rincones plagados de largos macarrones. Vemos algunos ramales secundarios que vuelven a cortocircuitar con la galería principal o terminan a los pocos metros. Antes de llegar al final decidimos volver sobre nuestros pasos y remontar los pozos para salir de la cavidad. Tras 8 horas de visita vemos de nuevo la luz del sol. Esta es una cavidad excelente que nos ha sorprendido muy gratamente.

 

El ramal suroeste de la planta inferior también esta muy concrecionado.

 

BIBLIOGRAFIA

 

Crochet P., Subias C. et Guiraud A. (2020). La rivière souterraine

de Cabrespine. Spelunca n°160. pp. 4-14

 

Dowey A. & Clergue P., 2010. Le Gouffre Géant de Cabrespine. Conseil Général de l’Aude, Gouffre

de Cabrespine. Réédition juin 2010. 40 pp.