viernes, 16 de agosto de 2019

CAMPAÑA BERNERA 2019

Inicio de la Campaña 2019

Como cada verano, la campaña de exploración del Sistema de la Peña del Mediodía, se centra en una entrada hasta el vivac 2, desde donde parten las puntas de exploración. Agradecemos una vez más a la SIE del C.E.Aliga por su invitación a continuar ayudando en las exploraciones, pues ya son 8 los años que llevamos colaborado.
Foto de grupo en la boca de entrada.
El ataque a las puntas de la cavidad, ha tenido lugar los días 9, 10 y 11 de agosto. En ella han participado Francesc Subiranas (SIE), Edu Mir (CE8), Jesús y Luis Almela (ECC). El viernes 9 se entra por la boca del Pozo Alto de la Chorrota a las 13:15 horas, para llegar unas cinco horas más tarde al Vivac 2. Una vez allí, se procede a desmontar la estructura del vivac, compuesta por mantas térmicas, reemplazándolas por una lona más confortable, mejorando de este modo los momentos de descanso. Antes de preparar la cena y descansar, también nos desplazamos al río Blanco para aprovisionar de agua el vivac. Tras cenar los 4 exploradores, nos disponemos a descansar para afrontar la jornada del día 10.  

Base del pozo de la Horquilla, llegando a Riopar.
Al día siguiente, tras preparar las sacas, emprendemos rumbo hacia la sala de Tapinyada, que constituye la punta de la cavidad. Esta zona fue descubierta en agosto de 2009, hace exactamente 10 años, y todavía sigue planteándonos algunos interrogantes. En este lugar, el más alejado desde la entrada, en 2015 se descubrieron las galerías de la Fontanería, río abajo del colector inferior de Tapinyada, dejando la punta un poco más alejada.

Tras tres horas de aproximación, pasando por lugares tan emblemáticos como los Collares, el pozo de la Horquilla, Riopar, El Mario Bros, Alcanzamos la sala de Tapinyada. En el último tramo antes de llegar a la sala se decide instalar un pozo de 15 metros, para alcanzar la sala ascendiendo un corto resalte, evitando así una serie de desfondes poco protegidos por los pasamanos.

Subi desobstruyendo en las zonas nuevas próximas a Tapinyada.
En este sector se revisa una galería dirección sur, que encontramos antes de ascender el resalte para llegar al sector Tapinyada. En esta corta galería se fuerzan dos pasos, uno inferior y otro superior que acceden a ambas galerías hasta ahora desconocidas. La tónica de estas galerías es su desarrollo sobre una discontinuidad bien marcada, aunque sus dimensiones son modestas. La dirección que toman es perpendicular a la galería de la Fontanería. Hacia abajo una rampa estrecha nos deja en la cabecera de un pequeños pozo, el cual continúa unos metros más abajo, pero termina por hacerse impracticable (26 metros de recorrido). El ramal que hay hacia arriba presenta algo más de desarrollo (95 metros) y parte de una estrecha gatera situada en el techo de la galería, a unos 4 metros del suelo. Esta prosigue durante unos 25 metros hasta bifurcarse. Hacia abajo un tubo descendente de 16 metros que finaliza en un tapón de arena, y hacia arriba otro estrecho tubo muy lavado por el agua, que en su inicio sube, pero al perder cota atraviesa una zona baja con mucho barro. Tras esta sube un poco pero con unas dimensiones cada vez más estrechas hasta encontrar un paso impenetrable. Es en esta última zona donde estalactitas y excéntricas blancas decoran las paredes.

Sala Tapinyada.
Cerca a esta galería pero en dirección norte, se revisa un pequeño resalte no ascendido, que permite acceder a un balcón sobre la sala. Este punto alto nos permite desplazarnos por el techo de diferentes meandros, comprobando que acaban cerrando. Por la parte superior del meandro por el que accedemos al sector, se realiza una corta escalada por un conducto que finaliza a los pocos metros obstruido por sedimentos.

Galería descubierta en 2019 y que se abren entre derrumbes.
Tras realizar una parada para comer, nos centramos ahora en la zona de bajada al río desde la sala Tapinyada, donde existen fuertes corrientes de aire. En esta zona pudimos superar el caos de bloques ubicado río abajo, progresando por las galerías de la Fontaneria varios centenares de metros y alcanzando un sifón (año 2015). Ahora se pretende superar el caos de bloque ubicado río arriba, por lo que se fuerzan todas las galerías que surgen en dirección norte, a diferentes niveles. Recordemos que desde la sala hasta el río encontramos un desnivel de 38 metros. A unos 15 metros de bajada encontramos a mano izquierda un paso entre bloques que sopla aire. Retirando los bloques accedemos a una discreta galería de 28 metros que finaliza en un colapso. Poco después reconocemos la parte posterior al colapso en otra galería nueva. Siguiendo el descenso hacia abajo, en una bifurcación se explora una gatera que da paso a una galería ascendente que en su inicio se reconoce el colapso que tapona la galería anterior. Esta galería finaliza de nuevo por otro colapso de bloques por donde viene la corriente de aire, topografiando solamente 34 metros.

Sala superior al riu de Tapinyada, donde se situa la punta de exploración actual.
Continuando la bajada hacia el río se fuerzan algunas gateras sin interés. Ya en el último tramo de bajada, donde una cuerda ayuda el descenso mediante un resalte-rampa de 17 metros, se fuerzan dos puntos que logran superar el caos de bloques que obstruía la continuación río arriba. Estos pasos nos llevan a varias estancias escalonadas muy alteradas por la caída de grandes bloques y donde el río circula por debajo de estos, no pudiendo progresar por su cauce. Alcanzamos un punto donde se ve el agua del río, pero esta queda parcialmente tapada por bloques. Topografíamos todo el acceso hasta esta nueva punta, añadiendo 66 metros al recorrido, pero impotentes al haber avanzado pocos metros hasta un nuevo colapso. En este sector nos encontramos con una importante discontinuidad, que nos recuerda morfológicamente al río de Via Nord, ubicado en el otro extremo del macizo, donde la progresión río arriba resulta muy dificultosa por las continuas obstrucciones que presenta el colector en su base. No obstante la corriente de aire nos señala un futuro prometedor.

Subi en el Mario Bros.
Desde esta punta alcanzada volvemos a la Tapinyada, donde comemos un poco y regresamos hacia el vivac 2, realizando una jornada de 15,30 horas de actividad donde se han cerrado varias puntas de este interesante sector. Tras un descanso reparador, se procede a hacer inventario y prepararnos para salir al exterior en 5 horas. A las 9 de la noche del día 12 ya estamos los 4 espeleológos fuera del sistema. En esta entrada se han topografiado 278 metros de nuevas galerías, siendo todos cortos ramales sin continuidad aparente, exceptuando las salas entre bloques río arriba, donde se puede seguir forzando un paso que supere el último colapso encontrado.


Vivac 2 renovado este año.
En esta visita tomamos datos sobre el agua del río de Tapinyada, con una temperatura de 3,7 ºC y conductividad de 147 micro siemens. Estos datos no se alejan demasiado de los muestreos en otros ríos del sistema. En las estancias descubiertas río arriba, así como en los metros iniciales de descenso al río, encontramos fino sedimento, que nos puede indicar inundaciones de este colector y ascenso del nivel de las aguas. Este ascenso en grandes episodios, creemos que podría ascender hasta la sala Tapinyada (38 metros de desnivel) y aportar agua al meandro de acceso al sector, que daría sus aguas al colector de Riopar. Según los datos de la Topografía, el tramo que conocemos del río de Tapinyada y la cota de su sifón terminal, se trata de un río independiente ubicado en cota por debajo del resto de colectores.

A continuación mostramos un vídeo de la punta de la cavidad río Tapinyada arriba, donde los bloques nos cierran el paso.