Ya hace tiempo
que mirando la topografía del Forat de Ferras nos dimos cuenta de que en su
parte final, antes de bajar el último pozo de 12 m., existía una chimenea y
tras ella algo por explorar. Pues también llevábamos meses con la intención de
ir a explorar aquello, pero siempre por unas cosas u otras nunca íbamos.
Nuestras ambiciones exploratorias nos impulsaban a escalar.
Descendiendo
la escalada que da paso a las nuevas galerías.
Por otra parte
la cavidad esta protegida por la presencia del murciélago
ratonero patudo (Myotis capaccinii) y
el murciélago mediano de herradura (Rhinolophus
mehelyi), que son especies catalogadas en peligro de extinción. Así, por el
decreto 82/2006, de 9 de junio, queda restringido el acceso a la cavidad desde
el 16 de marzo hasta el 15 de octubre (ambos inclusive).
Gatera en las nuevas galerías.
Por lo tanto, el pasado domingo 9 de marzo era el último domingo
que podíamos aprovechar para entrar en el Forat de Ferras hasta después de
verano. Y no lo desaprovechamos. Nos dirigimos Cristina, Lee, Gilabert y Luis a
la cavidad con el fin de escalar la chimenea final.
Fractura tras el pozo de entrada.
Una vez en la
base de la chimenea vimos que aquello tiraba, así que comenzamos la escalada.
El primer tramo era muy fácil, se podía ascender en oposición con ayuda de
algunos bloques. Llegamos a una primera repisa, y la continuación era más
vertical, pero en unos 3 metros llegamos a una segunda repisa. Desde aquí solo
quedaba trepar por una rampa inclinada.
Los
topógrafos en las nuevas galerías.
Pero la
sorpresa fue encontrar una chapa con un mosquetón en la cabecera de la rampa;
no éramos los primeros. La chapa estaba grabada con las siglas SES. No sabemos
a que club pertenece, ni en que época fue hecha la escalada, pero no dejaron
ninguna cuerda para que subieran los siguientes visitantes.
Sala
existente al otro lado del pasamanos.
Tras la rampa aparece
una estrechez y tras ella se abre ante nosotros un pozo (P-9) que superamos por
medio de un pasamanos. Llegamos a una sala de buenas dimensiones y cubierta de
bloques. Continuamos descendiendo un par de resaltes, que nos dejan en una zona
más llana. Desde aquí podemos continuar por 2 sitios: Descender entre bloques y
recular hacia el sur, llegando a la base del P-9 que hemos flanqueado antes por
medio de un pasamanos. O bien, Trepar un delicado resalte de 10 m. que nos
lleva a otra galería mas estrecha donde se cierra a la fractura.
Aunque no
éramos los primeros en explorar estas nuevas galerías, exploramos y
topografiamos toda la zona nueva. El recorrido de las nuevas galerías es de 108
m. Y la cavidad pasa a tener un desarrollo total de 383 m. y la profundidad
sigue siendo de -107,5 m.
Topografía
de la zona nueva.