Dentro de escasas semanas,
alcanzaremos las 6.000 cavidades subterráneas castellonenses,
registradas en el proyecto SICE-CS
(Sistema
Informático
de Catalogación
Espeleológica.
Provincia de Castellón. www.cuevascastellon.uji.es
). Realmente se trata de un acontecimiento histórico en la
espeleología del país, dado que hasta la fecha no existe ninguna
provincia española con tal densidad de fenómenos subterráneos
catalogados de forma sistemática, exhaustiva e integral, y a la vez
compartidos de forma tan pública y eficiente.
Estado de un fichero del catálogo en 1995 |
Tras más de 10 años recogiendo, ordenando y clasificando la dispersa información espeleológica de la época, en septiembre del año 1999 alcanzamos las 3.000 cavidades subterráneas catalogadas, con información bastante escueta y almacenada en una base de datos en modo local, mediante una aplicación informática pionera en la época, diseñada y programada por nosotros mismos en ACCESS/97.
Carátula del cd del SICE-CS en 2004 |
Formato de un fichero en 2004. |
Las 4.000 cavidades se alcanzaron en diciembre de 2005. Algo más de tres años más tarde, en febrero de 2009 se registró la cavidad subterránea número 5.000, esta vez ya con la aplicación informática utilizada en estos momentos y accesible de forma abierta por Internet.
Casi 7 años han tenido que pasar para
alcanzar otro millar más de cavidades. Cada vez se hace más difícil
incrementar la cifra de fenómenos subterráneos registrados, dado
que éstos son los que son y las comarcas provinciales son también
limitadas. Los parámetros que en estos momentos se incrementan a un
ritmo superior, son los registros de topografías y coordenadas
geográficas, que en estos momentos ya representan el 55,5% y el
67,6% respectivamente, de las casi 6.000 cavidades inventariadas.
Con el fin de dar una mayor notoriedad
al acontecimiento, en dos próximas entradas ampliaremos diversos
conceptos de la aplicación SICE un tanto desconocidos u olvidados.
Estos son los siguientes:
- ¿Qué tipo de cavidades registramos en el SICE?.
- Grado de precisión geográfica en las cavidades registradas en el SICE.
Imagenes y texto: Joaquín Arenós Domínguez.